A continuación encontrarás tres temáticas que complementan la presentación general de un Proyecto de Inversión. Se te pide hacer un análisis de la información para tener más claro su contenido.
Temática 1: Justificación del proyecto
La justificación del proyecto, explica las maneras de cómo:
* Podrá solucionar el problema planteado y cuál es su contribución.
* Impactará en el corto, mediano y largo plazo.
* Beneficiará a los ejecutores.
* Se obtendrán utilidades.
Además se deberá incluir: interés, novedad del proyecto, plantear preguntas que llevan a formular un problema, justificar la importancia y las razones que motivan dicho estudio.
El estudio que se va a llevar a cabo, debe tener un propósito definido tan importante que demuestre que se justifica su ejecución.
Para justificar la importancia de un estudio se sugiere observar lo siguiente:
1. Conveniencia: ¿Por qué es conveniente el estudio?
2. Proyección social: ¿Cuál es su importancia para la sociedad? ¿Quiénes se beneficiarán con los resultados del estudio?, ¿De qué manera se beneficiarán? Estas preguntas hacen alusión a la proyección social del estudio.
3. Implicaciones prácticas: ¿Qué problema ayuda a resolver?, ¿Repercute en beneficio de la resolución de otros problemas similares?
4. Importancia teórica: ¿El estudio permitirá llenar algún vacío del conocimiento en el área de estudio?, ¿La información que se obtenga puede servir para comentar, desarrollar o apoyar una teoría?, ¿Se podrá conocer el comportamiento de una o más variables o categorías y la relación que existe entre ellas?, ¿Se obtendrán nuevos aportes con los resultados del estudio?, ¿Existe la posibilidad de presentar ideas, propuestas o nuevas hipótesis para estudios posteriores?
5. Aprovechamiento metodológico: ¿el estudio contribuirá a la creación de nuevos instrumentos para recolectar la información?, ¿Se propondrán nuevos esquemas para el análisis de la información recolectada?, ¿Se logrará la definición de algún concepto o variable?, ¿Presentará ideas para estudiar en forma más adecuada a la población de usuarios de la información?, ¿Presentará nuevos modelos, métodos o técnicas para estudiar a los usuarios y sus relaciones con la información?
No es necesario responder afirmativamente a todas las preguntas planteadas; a veces solo responde a una de ellas, pero el estudiante deberá de agotar al máximo las múltiples posibilidades que le permitan justificar su proyecto.
Temática 2: Formato de presentación de un proyecto
En la actualidad, no existe un formato único para la presentación de un proyecto. Sin embargo, lo recomendable es formular uno.
Se presentan de manera general algunos criterios sugeridos para la estructuración y formulación de un perfil de proyecto. No se pretende dar una fórmula única que deba seguirse al pie de la letra; al contrario, es importante esbozar una estructura básica que puede usarse de manera flexible y adaptable.
Es importante mencionar que existen software de formulación de proyectos que en ocasiones ya tiene un guión establecido y cuentan con una guía y apoyo su elaboración y redacción.
Caratula y tabla de contenido.
La caratula del documento debe contener la información básica y relevante sobre el proyecto, a la par de lucir un aspecto sobrio y profesional. Esto no quiere decir que se tenga que realizar un gasto excesivo en materiales o cubiertas especiales.
Los principales aspectos que se deben incluir son:
• Nombre y logo de la organización o empresa
• Nombre del proyecto (debe permitir identificar la naturaleza del proyecto, a la vez que la solución del problema previamente identificado)
• Mes y año de elaboración de la propuesta
Si la extensión del documento es superior a cinco páginas, se deberá incluir una tabla de contenidos que permita una más fácil ubicación de sus secciones.
Resumen ejecutivo.
Por lo general, el resumen ejecutivo es una de las principales secciones de una propuesta de proyecto. Esta sección constituye el punto de partida que despierta el interés. En tal sentido, es fundamental poner especial cuidado en su redacción y consistencia. Como su nombre lo dice, un resumen ejecutivo es una síntesis de la información más relevante del proyecto. Por lo general, se recomienda que su extensión no exceda las dos páginas. El resumen ejecutivo debe incluir:
• Descripción breve sobre el problema identificado
• Explicación sobre la solución del problema motivo del proyecto, que incluya sus actividades, el número de beneficiarios, cómo y dónde operará, el tiempo requerido y el personal responsable de su ejecución
• Los fondos requeridos para la operación del proyecto y los planes que garanticen su sostenibilidad en el futuro.
El resumen ejecutivo debe ser redactado al final, una vez que se terminó de elaborar el documento. Muchas veces esta es la única parte que los evaluadores leen y en la que se basan para tomar decisiones, o para determinar si continúan leyendo la propuesta de proyecto presentada.
Introducción y diagnóstico.
Esta sección se orienta, básicamente, a describir el problema central y a demostrar la calidad y calificación de la organización que implementará el proyecto.
Como se ha mencionado, es preciso elaborar esta sección tratando de dar la mayor cantidad de elementos de juicio que apoyen nuestra propuesta. Se recomienda evitar ser declarativo al momento de definir el problema. No se debe describir el problema sobre la base de la experiencia personal o sobre creencias. Se debe procurar respaldar el contenido de la propuesta con argumentos sólidos, como estadísticas actualizadas, fotos o la opinión de expertos o instituciones acreditadas.
En la parte del diagnóstico se debe describir la situación actual identificando la problemática que se quiere solucionar, la misma que no se puede resolver con los recursos humanos y materiales existentes.
Antecedentes.
En esta parte se debe indicar cuál es el origen de la propuesta, qué factores y quienes participaron en la elaboración, qué fuentes fueron consultadas, profundidad y vigencia de la investigación, presentar un diagnóstico que muestre la necesidad y viabilidad de adelantar el proyecto, con los principales indicadores de medición económica, las características de la población y geográficas de la región. Además de indicar los proyectos, trabajos y/o acciones que hayan ejecutado o estén en ejecución sobre el tema y/o en el área del proyecto.
Planteamiento del problema.
En este capítulo debe delimitarse y describirse claramente cuál es el problema o la situación que el proyecto pretende atender. No todo lo negativo ni la falta de algo es un problema. Lo anterior puede referirse a la necesidad de mejorar algo que funciona bien, pero que puede ser optimizado El problema se define como una situación indeseada para uno o varios actores de una región, comunidad o institución concreta.
Se debe especificar de la manera más clara y precisa el problema central identificado, así como sus características cualitativas y cuantitativas. Uno de los errores más comunes en la especificación del problema consiste en expresarlo como la negación o falta de algo. En vez de ello, el problema debe plantearse de tal forma que permita encontrar diferentes posibilidades de solución.
Luego de haber sido definido el problema central, motivo del proyecto, se debe determinar tanto las causas que lo generan como los efectos negativos que este produce. Para ello, lo más recomendable es elaborar un árbol que interrelacione en forma directa e indirecta las causas con el problema central y con los efectos generados. A esta herramienta se la conoce como el árbol causa-efecto.
Justificación.
Exprese las razones por las cuales cree es necesario desarrollar el proyecto. Caracterice brevemente el área de influencia y el problema ambiental con sus causas y efectos, así obtiene la situación actual o línea de base sobre la cual se medirá el proyecto. Debe basarse en el análisis que llevó al conocimiento del problema. Para explicar cómo el proyecto contribuye a solucionar el problema identificado inicialmente, se pueden tener en cuenta los siguientes aspectos:
• En qué medida el proyecto contribuye a solucionar el problema planteado.
• Cómo los beneficiarios del proyecto recibirán los resultados.
• El por qué de la localización y del área de influencia del proyecto.
• Cómo la tecnología propuesta es adecuada y permite contribuir a la solución del problema y conservar o mejorar el medio ambiente.
• Razones por las cuales se solicita la cooperación: explicar el motivo por el cual se considera necesario el apoyo para adelantar el proyecto.
• Análisis de la equidad del proyecto a la equidad de género, mostrando explícitamente en qué medida mujeres y hombres participan de las acciones del proyecto, y se benefician de sus resultados.
Objetivo general.
La definición del objetivo nace del problema y sus causas para identificar un propósito (qué se va a hacer), y un fin (para qué se va a hacer). La formulación de este objetivo deberá contemplar el cambio concreto que mediante la ejecución de este proyecto se alcanzará en relación con el problema identificado.
Hay que saber diferenciar las dinámicas, procesos o metodologías que son propias de los objetivos con las actividades que hay que desarrollar para que la dinámica, el proceso o la metodología se cumplan. Por lo anterior en el objetivo no van actividades puntuales, sino el cúmulo de ellas expresadas en una dinámica o característica que los involucra o las acoge.
Objetivos Específicos.
Cada objetivo específico se refiere a una causa crítica del problema. El conjunto de objetivos específicos permitirá cumplir el objetivo general. Cada objetivo específico también debe estar orientado por un propósito (Qué) y un fin (Para qué). Su planteamiento debe partir del análisis del árbol de problemas, de tal manera que cada objetivo específico sea una respuesta de solución a un problema o necesidad. Los objetivos específicos son las soluciones concretas a las causas del problema, que el proyecto desea resolver. Estos objetivos son los fines inmediatos que el proyecto se propone alcanzar en un tiempo determinado y se deben formular en términos de solución a las causas del problema planteado.
Tanto el objetivo central como los objetivos específicos deben reflejar los cambios que se espera lograr con la intervención del proyecto. Se debe evitar el planteamiento de objetivos muy amplios, ambiciosos y confusos. Por el contrario, es preferible redactarlos de una manera clara cuya descripción no se extienda más de una página y de modo que reflejen lo realmente alcanzable de acuerdo con la magnitud de la inversión. Es recomendable numerar los objetivos específicos como: Objetivo 1, Objetivo 2, etcétera, de manera que ayude a su rápida identificación y referencia en el documento.
Anexos.
En esta sección se deberá incluir toda la información relevante (estadísticas, fotografías, cartas de autoridades, involucrados, etcétera). Asimismo, se puede incluir la matriz del marco lógico, así como desarrollar con mayor detalle el cronograma de trabajo, entre otros.
Estudios que conforman el proyecto
Las partes que integran un estudio de factibilidad son las siguientes:
• Estudio de mercado.
• Estudio técnico.
• Estudio administrativo.
• Estudio financiero.
El estudio de mercado permite conocer con cierta precisión si los productos o servicios que la empresa desea generar serán aceptados por el mercado. Si el estudio determina que es preciso hacer modificaciones a los productos o servicios, la organización debe valorar la conveniencia de hacerlos para disminuir el riesgo de que posteriormente sean rechazados por los consumidores. Asimismo, el estudio de mercado proporciona el perfil de los canales de distribución más adecuados para colocar el producto en el mercado, especifica las características de los competidores, precios, servicios, garantías, en resumen, contiene todo lo relacionado con los productos, precios, consumidores, canales de distribución, etcétera.
Por otro lado, el estudio técnico proporciona los elementos para evaluar si es factible generar el producto y/o prestar el servicio. En caso afirmativo, se realiza la planeación de la planta de producción, actividad que incluye los equipos y maquinaria necesarios para efectuar los procesos de manufactura, con lo cual se garantiza que el producto se podrá fabricar. Si se deseara, por ejemplo, producir automóviles que no usen combustibles derivados del petróleo, es necesario tener la seguridad de que existen los procesos y diseños para fabricarlos. El estudio técnico describe el Know how de los procesos productivos, así como las instalaciones, maquinaria, equipo y herramientas para que sea posible evaluar su impacto en el monto de la inversión que se pretende realizar.
El estudio administrativo permite establecer las necesidades de personal administrativo, de equipos y materiales que se necesitarán para hacer funcionar a la organización proyectada. Para ello, se definen los puestos necesarios, así como las líneas de autoridad, responsabilidad y comunicación que faciliten el trabajo del personal y el logro de los objetivos del proyecto de inversión. También se establece el tipo de estructura legal que adoptará la organización. En síntesis, el estudio administrativo permite conocer la viabilidad estructural y legal de funcionamiento de la organización.
Por medio del estudio financiero se genera la información financiera y se calcula la rentabilidad del proyecto con base en las utilidades que posiblemente generará y el monto de la inversión. Las pruebas financieras que se utilizan son: periodo de recuperación, tasa simple de rendimiento, tasa promedio de rendimiento, valor presente neto, tasa interna de rendimiento, costo-beneficio e índice de rendimiento, entre otras.
Los anteriores apartados normalmente se establecen por parte de cada institución y se desarrollan de acuerdo a los resultados que se obtienen. Esta parte es normalmente “Universal” en cuanto a la metodología que se desarrolla para los proyectos.
Como se mencionó al inicio, este tema es solo una guía de los principales criterios que se desarrollan en un formato de presentación de proyecto.
Temática 3: Presentación del anteproyecto.
El termino proyectar significa idear, trazar, disponer o proponer el plan y los medios para lograr un objetivo. Cuando se menciona que es necesario elaborar un plan para conseguir un objetivo es preciso especificar con qué recursos y cómo se realizarán las actividades que se requieren para alcanzar el resultado deseado, que en este caso es concretar la alternativa de solución planteada a nivel de idea en el proyecto de inversión.
Por lo general, un plan contiene objetivos, estrategias, políticas, programas y procedimientos para alcanzar los objetivos. En el momento de establecer los objetivos se determinan los mecanismos para conseguirlos, de donde surge la necesidad de realizar diversos estudios que permitan evaluar la viabilidad del proyecto. Tales estudios ayudan a establecer los mecanismos necesarios para cristalizar los objetivos planteados en las alternativas de inversión. Esta actividad requiere de información específica y detallada, pues ella marca la diferencia entre el anteproyecto y el proyecto.
El estudio de pre-factibilidad se construye con información proveniente de fuentes secundarias de información, que aún no es demostrativa pero es útil para presentar un panorama de la inversión. Los elementos que contiene el estudio de pre-factibilidad son los siguientes:
• Estudio de mercado.
• Estudio técnico. Estudio administrativo.
• Estudio financiero.
Los contenidos de cada uno de los estudios son muy parecidos a los que sustentarán el proyecto definitivo, al que también se conoce como estudio de factibilidad; la diferencia estriba en la profundidad y precisión de la información que se utiliza para confeccionar cada uno de ellos. Por ejemplo, el costo de la construcción de los inmuebles necesarios se detalla con base en precios promedio de construcción; en el caso de la demanda, se pronostica con base en las tasas esperadas de crecimiento de la población registradas en el pasado, pues se considera que las mismas tendencias y costumbres de consumo se mantendrán en el futuro. Si se trata de establecer los costos de financiamiento, éstos se determinan, en términos generales, de acuerdo con los costos promedios de las diferentes fuentes de financiamiento que existen en los mercados financieros.